Yo amo mi panadería es un evento que se está llevando a cabo en el primer nivel del centro comercial Plaza Las Américas.
- ¿Recuerdan el antiguo local donde era Border's?
Pues ahí es. Se encuentra al lado de la tienda Old Navy.
Les cuento que hoy hice varias cosas y, mientras daba una vuelta por el centro comercial, divisé el antiguo espacio de Border's operando. Leí algo así:
-"Mi panadería ¡Plaza Las Américas!.
Obviamente me dió curiosidad y había mucha gente en el local. Asi es que decidí entrar y participar de la actividad.
Yo amo mi Panadería. Así se llama.
Al entrar nos ofrecieron una charla amena sobre el trigo, su proceso de refinamiento y finalmente cómo se elaboran los distintos tipos de pan y postres. Cuando terminas esa charla tan enriquecedora, pasas a los distintos espacios disponibles para degustar panes, postres y café. Te contaré mi experiencia bonita del día.
Me encontré en el camino unas personas humildes, amables y sumamente dulces. Solo sé que el chico que me atendió es Wilfredo. (Excelentes seres humanos con una alta calidad de vida. Ojalá y todas mis experiencias fueran tan bonitas como la de hoy con ellos.) Wilfredo trabaja en La Orocoveña Biscuit.
Averiguando qué cosas tenía para degustar y que yo no había probado, descubrí unos postres riquísimos llamados "Mal Cortao" y las "Cucas de jengibre". Miiiiireeeeeennnnnnn....
- ¡¡¡¡¡¡ QUE COSAS MAS RICAS PADRE AMADOOOOOOO!!!!!!! WOW!!!!!! DIVINO. PERO UNA COSA ESPECTACULARMENTE RIIIIIIICAAAAAA.
Las tienen que probar. Se consiguen en los supermercados de la isla.
"Mal Cortao"
Me costó $2.75 y trae cuatro como puedes ver en la foto.
"Cucas de jengibre"
Me costó el paquete $1.89.
Les dije que los visitaría mañana cuando salga a las 12:00 del mediodía. Mi almuerzo será un mal cortao con café que tienen disponible en otro cubículo ubicado en el mismo espacio. Nos hablaron de todos sus productos y no nos dieron a probar una cantidad pequeña. NOOOOOOOOOOO. NO. Fue una galleta y 1/4 de canto. Les digo que fue una experiencia bien linda.
Seguimos en nuestra ruta y probamos pan y postres de calabaza. Había en otro cubículo un postre llamado "quesito" que aquello. .. WOW... DIVINO. Estaba calentito, suave, jamás en mi vida había probado algo tan sublime como ese postre. JAMÁS. Y, hoy saqué a pasear a la gordita que vive en mi, no tienen idea cuánto comí.
Pero claro, todo lo bueno tiene también una parte mala. Más adelante me encontré un cubículo con pan y postres. La señora tenía una cara de pocos amigos pero aún así decidí probar unas donitas de azúcar que estaban allí.
MIIIIIIREEEEEEENNNNNNN.... NO LO HAGAN. NOOOOOOOOOOO. NO. NO. NO. NOOOOO. NO. NOOOOOOOO. REPETIMOS... NOOOOOOOOOOO. NO. NOOOOOOOOOOO. NO.
Usted ve una mesa con postres, pan con mimes y donas y lo sigue. Está ubicada al lado del quesito divino. Mira, yo, es que no tengo palabras para expresar lo mala que estaba esa dona.
MALA, MALA, MALA, MALA, MALA, MALA, MALA, MALA, MALA, MAAAAALLLAAAAAA. MALÍSIMA.
En mi vida había probado una cosa tan mala como esa. Bueno, hasta acidez me provocó. Tenía un sabor a pescado. ¡Ay no! De verdad que no. Fría, mala y con mal sabor. NOOOOOOOOOOO. NO. NO PUEDO BREGAR. Lo siento pero estaba mala. La boté en el recipiente de basura más cercano que encontré. Me revocó el estómago de lo mala que estaba.
Justo al lado, había una muchacha muy amable también vendiendo las tortillas hechas aquí y estaba preparando unas con queso para consumo del público.
¡¡¡RIQUIIIIIIIISIIIIIIIIMAAAAAAAAASSSSS!!!!
Pruébenlas si tienen la oportunidad. No se arrepentirán. Les debo el nombre pero estaban divinas y me ayudaron a bregar con la dona satánica.
Finalmente pasé a mano derecha y en el fondo una panadería estaba ofreciéndole al público pan y budín de pan.
¡¡¡¡¡RIQUIIIIIIIISIIIIIIIIMOOOOOOOSSSSS!!!!
Tienen que ir mañana y el domingo. La actividad será solamente por esos dos días. Comenzó hoy pero si restamos pues quedan dos días más. Hice mi fila y pagué $4.98 en total por mis postres. Y lo mejor es que me regalaron una bolsa anaranjada de material reciclado. ¡¡¡¡Bella!!!!!
La actividad es completamente gratuita. Si quieres comprar un producto que te haya encantado pues lo tienes que pagar. Si ninguno te motiva pues vas, pruebas los panes, postres y café (que se acabó pero mañana habrá), pasas un ratito chévere, te tomas fotos en el photobooth y te vas.
Los productos son de aquí y mañana sabrán que me daré la vuelta, compartiré con tanta gente hermosa, consumiré mi almuerzo, me tomaré fotos y seguiré trabajando porque tengo varias cosas que luego les contaré. Yo amo mi panadería. ¿Y tu? ¡¡¡¡Hasta la próxima!!!! Xoxo. B.
